Diciembre de 2025 — El contrato Saab Colombia generó comentarios en varios medios y redes sociales, motivo por el cual la empresa publicó información sobre el proceso de adquisición de una capacidad integral de superioridad aérea para el país. El acuerdo estableció lineamientos técnicos, financieros y operativos para los próximos años.
Contrato Saab Colombia: puntos centrales del proceso
Saab indicó que sus valores institucionales se basaron en confianza, motivación y experiencia. La empresa señaló que estos principios orientaron decisiones asociadas al contrato, desde la fase inicial de negociación hasta la definición de responsabilidades asumidas por cada parte involucrada. También mencionó que estos valores guiaron los mecanismos internos de cumplimiento.
El acuerdo contempló la adquisición de 17 aeronaves: 15 Gripen E (monoplaza) y 2 Gripen F (biplaza). El paquete incluyó sensores avanzados, radares, simuladores, equipos de autoprotección, componentes logísticos y armamento. Saab informó que el país no debía realizar un pago inmediato, dado que el esquema financiero distribuyó los costos durante siete años, protegiendo al Estado frente a variaciones inflacionarias.
Transparencia en la negociación del contrato Saab Colombia
La empresa aseguró que el proceso se desarrolló bajo estándares éticos. Saab reiteró que mantuvo “tolerancia cero hacia la corrupción” y que aplicó políticas alineadas con directrices de la OCDE. Indicó que la negociación se realizó sin intermediarios externos y exclusivamente con representantes oficiales designados por Colombia y Suecia.
El proceso contó con auditorías internas y externas destinadas a la prevención de conductas indebidas. Saab señaló que estas herramientas operaron de manera continua y que formaron parte del sistema corporativo establecido para negociaciones internacionales. Un análisis adicional sobre compras públicas defensivas puede consultarse en Lado B.
Especificaciones y alcance del proyecto de defensa
Saab manifestó que sus ofertas internacionales no eran comparables, debido a que cada país entregó requisitos distintos. En el caso colombiano, la adquisición representó una capacidad integral no existente en periodos anteriores. Por este motivo, el alcance del contrato abarcó componentes técnicos, repuestos, sistemas de entrenamiento, logística, simuladores, seguros y condiciones financieras específicas.
La compañía explicó que el acuerdo también incluyó un paquete de cooperación industrial. Este contempló la instalación de una planta de producción de paneles solares en la región Caribe, además de iniciativas en salud, suministro de agua potable y proyectos de desalinización para La Guajira. El paquete consideró además transferencia tecnológica en capacidades aeronáuticas y de ciberseguridad para la Fuerza Aeroespacial Colombiana.
Según documentos públicos de entidades como Transparencia Internacional , los procesos de adquisición militar se evaluaron usualmente bajo parámetros de integridad y trazabilidad. Saab afirmó que su estrategia interna se alineó con estos parámetros, tanto en monitoreo contractual como en sus procedimientos corporativos tradicionales.
Aspectos operativos y compromisos de largo plazo
Además del suministro de aeronaves y sistemas, Saab incorporó entrenamientos especializados para personal técnico y operativo. Estos procesos abarcaron simulación avanzada y transferencia de conocimientos en mantenimiento, operación y seguridad aérea. La empresa señaló que esta fase se desarrollaría durante los siete años que estructuraron el financiamiento del proyecto.
- Entrenamientos y simulación para personal técnico.
- Transferencia tecnológica en aeronáutica y ciberseguridad.
Saab indicó que su sede central se encuentra en Suecia y que cuenta con operaciones en distintos países. La empresa participa en el desarrollo de sistemas aeronáuticos, sensores, plataformas de mando y control, armamento y sistemas submarinos. El comunicado oficial cerró con datos de contacto y dirección institucional en Linköping.