Del olvido al podio: Pesistas colombianos logran plata en París 2024

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Foto: Redacción Lado B

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París, Francia – Los Juegos Olímpicos de París 2024 fueron escenario de un nuevo capítulo dorado para la halterofilia colombiana, con Yeison López y Mari Leivis Sánchez asegurando medallas de plata en sus respectivas categorías, elevando aún más la rica historia del país en esta disciplina.

 

Desde el histórico oro de María Isabel Urrutia en Sídney 2000, Colombia ha sido un protagonista constante en la halterofilia olímpica. Este viernes, Yeison López, compitiendo en la categoría de 89 kilogramos, y Mari Leivis Sánchez, en la categoría de 71 kilogramos, continuaron esta tradición de éxito.

 

Yeison López, oriundo de Chocó, mostró un desempeño impresionante al levantar un total de 390 kilogramos, asegurando la medalla de plata después de un reñido duelo con el búlgaro Karlos Nassar, quien estableció un nuevo récord mundial con un total de 404 kilogramos. A pesar de la dura competencia, López se mostró emocionado y orgulloso de su logro, que marca un hito en su carrera deportiva.

 

Por su parte, Mari Leivis Sánchez, nacida en Turbo, Antioquia, brilló en la categoría de 71 kilogramos. Su determinación se vio recompensada cuando, en su último intento, logró levantar 145 kilogramos en el envión, superando por un kilo a la ecuatoriana Angie Paola Palacios y asegurando la plata. Este logro no solo reafirma su posición como una de las mejores pesistas del continente, sino que también suma una medalla más al palmarés de Colombia en los Juegos Olímpicos.

Con estas dos medallas, Colombia ya suma tres preseas de plata en París 2024, junto con la conseguida por el gimnasta Ángel Barajas en barra fija. Aún quedan esperanzas de más medallas para la delegación colombiana, con la participación de Kevin Quintero en ciclismo, Flor Denis Ruiz en atletismo y María José Uribe en golf durante el fin de semana.

 

Los orígenes humildes y la falta de apoyo a los deportistas

 

Sin embargo, detrás de estas hazañas deportivas se esconde una realidad menos gloriosa: el escaso apoyo que estos deportistas reciben por parte de los gobiernos y las instituciones. Tanto Yeison López como Mari Leivis Sánchez provienen de contextos humildes, donde las carencias fueron constantes y donde llegar a la élite del deporte mundial requirió una determinación férrea y sacrificios personales inmensos.

 

Yeison López creció en un entorno marcado por la falta de oportunidades en su natal Chocó, una de las regiones más empobrecidas de Colombia. Mari Leivis Sánchez, oriunda de Turbo, Antioquia, también enfrentó innumerables dificultades económicas y sociales. En un país donde el deporte muchas veces se ve como un lujo y no como una herramienta de desarrollo, estos atletas han tenido que superar no solo a sus rivales en la tarima, sino también a un sistema que frecuentemente les da la espalda.

A pesar de la falta de recursos y apoyo constante, estos deportistas han llevado con orgullo el nombre de Colombia a lo más alto. Es irónico y hasta indignante que, a pesar de estas carencias, muchos dirigentes y políticos, que en repetidas ocasiones han recortado el presupuesto destinado al deporte, se apresuren a montarse en el bus de la victoria cuando se logra un triunfo. Esos mismos que abandonaron a nuestros atletas en los momentos difíciles son los que luego aparecen en las fotos, celebrando y atribuyéndose parte del éxito.

 

Es necesario un cambio de enfoque y un mayor compromiso por parte de los gobiernos para garantizar que nuestros deportistas reciban el apoyo adecuado desde el inicio de sus carreras. No podemos seguir permitiendo que el talento y la dedicación de jóvenes como Yeison López y Mari Leivis Sánchez dependan exclusivamente de su esfuerzo individual y de la buena voluntad de unos pocos. Estos triunfos deberían servir como un llamado de atención para que se realicen las inversiones necesarias en la formación y el bienestar de nuestros deportistas, no solo cuando alcanzan la gloria, sino durante todo su proceso de crecimiento y desarrollo.


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